miércoles, 23 de abril de 2014

Un libro en cueros. Control de lectura 7

imagen tomada de www.palabrosa.com


En 1981, Erving Goffman describió la interacción social como una representación teatral. Cuando nos presentamos ante otros, mostramos “máscaras”. Como si estuviéramos ante reflectores y un público siguiera cada acto y sólo detrás de escena nos mostramos a nosotros mismos.  
     Frente a esta elaboración  el uso de ropa forma parte esencial.  Según el zoólogo Desmond Morris, el hombre es un “mono desnudo”, porque a diferencia de los otros animales de la naturaleza, el ser humano nace desnudo al mundo, sin más protección que unos cuantos milímetros de tejido epitelial. ¿Qué hacer cuando los otros tiene pelaje, plumas, espinas como medio de protección? Frente a este desamparo, el homo sapiens se cubrió con ropa y con el tiempo adquirió un significado más allá para el que fue designado.
     En los libros ocurrió lo mismo. Recubrimos los libros para protegerlos, para salvaguardarlos del polvo y demás factores externos. Pero a diferencia de la ropa que usamos, el ropaje del libro forma parte de él, de lo que le libro es. Claro que el uso posterior de materiales más elaborados, como cartón, diferentes cartulinas e incluso texturas, es un reflejo de las posteriores  atribuciones al que resguarda el conocimiento.
    Para conocer mejor a esa deidad del saber, que es el libro, hay que conocerlo “fuera de escena”. Hay que quitarle la ropa y observar cada una de las curvas (en su caso, rectas) que lo hacen ser. Olerlo hasta el pegamentos de su terno. Sentir la delicada capa pasta del couché y la finura del pergamino vegetal. Deshacerlo todito, disfrutar cada una de sus partes y luego leerlo.
¡Desnudemos el libro!

Los órganos del libro

1.      Cubierta o primera de forros
En ella se indican el nombre del autor, título  y subtítulo de la obra, número de volumen o tomo y nombre de la editorial.





2.      Segunda de forros o reiteración de la portada.
En la mayoría de los casos va en blanco, pero las editoriales suelen ocupar el espacio para anunciar otras obras del autor, títulos de la colección, etc.



3.      Páginas falsas, e respeto o de cortesía
Son la las páginas 1 y 2, suelen ir en blanco.



4.      Falsa portada, anteportada o portadilla.
Es la página tres. En él se incluyen sólo el título del libro y se registra si pertenece a una colección o serie.


5.      Contrapórtada frente-portadilla
Es la página 4. Por lo general va en blanco o suele contener el nombre del traductor o ilustrados (sí los hay).
6.      Portada
Comprende el nombre del autor, título completo de la obra, nombre de la editorial. En ocasiones también se incorpora el nombre de traductor, prologuista, introductor, etc.



7.      Página legal.
Es la página en donde se imprimen todos los datos que por ley debe llevar un libro: propietario de los derechos de autor, fecha de publicación, nombre y domicilio de la editorial, los números ISBN de la obra y, en su caso, la leyenda “Impreso en México”.



8.      Dedicatoria o epígrafe.
Es una breve dedicatoria del autor. Usualmente va en la página 7 antes de que comience el texto del libro.
9.      Índice general, de contenido o tabla de materias.
En este apartado se colocan las partes y secciones que componen el libro. En México se acostumbra a ponerlo al final, pero es preferible que vaya al principio. Esto facilita el contenido a los lectores.



1-.  Texto
Es la composición como tal del libro, su cuerpo. Se constituye no sólo de texto (que varía en su tipografía) ilustraciones, imágenes, tablas, etc. Es regla general que el texto siempre tiene que empezar en página impar.  En el caso en que se divida en capítulos o secciones, se dejará un espacio en blanco a manera de seguir la regla.


11.  Apéndice o anexos.
12.  Cuadros y material gráfico extra
13.  Notas
Cuando las notas no se incluyen al pie de página, se desarrollan en un apartado diferente.


14.  Bibliografía
15.  Vocabulario o glosario
16.  Índices analíticos
17.  Índices de láminas


18.  Índice general
19.  Colofón
Es la sección en la que se imprimen el nombre y director del impresor, fecha en que terminó de imprimirse la obra y el número de ejemplares de un tiraje.

20.  Tercera de forros o reiteración de contraportada
Al igual que la segunda de forros, puede ir en blanco, pero las editoriales suelen ocupar este espacio con fines publicitarios.

21.  Cuarta de forros o contraportada.
Es la parte posterior del libro. Se suele colocar una breve presentación del libro, una nota sobre el currículum del autor  o críticas que ha recibido la obra. Todo esto porque es uno de los apartados a los que primero tiene acceso el lector, por lo tanto, su fin es alcanzar la compra.


Algunas otras secciones pueden serla sección de “fe de erratas”. En algunos libros no se imprime al mismo tiempo que el resto de la obra, por lo que se inserta una hoja aparte en el libro.


El ropaje del libro

Nosotros usamos faldas, pantalones, blusas, etc. Un libro siempre presenta divisiones. Éstas suelen ser: secciones, partes, tomos o libros.
Pero estas segmentaciones no sólo son en macro. Si continuamos con la comparación del vestido humano, en los textos, otras elementos que fungen como divisiones serían el equivalente a los accesorios. Y son:
1.      Letras
Éstas cambian de acuerdo a la función que desempeñen; como títulos, subtítulos, encabezados, notas al pie, aclaraciones, el cuerpo del libro, etc.
Por lo general la tipografía siempre se elige de acuerdo a una “personalidad” de la editorial. Se unifica y se establecen los criterios tipográficos para cada función.
La disposición de las oraciones también afecta, ya que aquellas que se encuentren centradas tienen mayor jerarquía.
2.      La numeración
Por obvias razones, los números tiene  la función de delimitación en un texto. Ya sea en tanto a las páginas (anuncian que allí terminó una página), los capítulos o los temas.
3.      Los espacios en blanco.
Un “colgado”, es la separación que se deja entre la mancha del cuerpo del texto y el encabezamiento. Mientras más ancho, significa que hay un cambio de tema, por ejemplo.





El tamaño sí importa

Para un mejor control y distribución, la ropa se divide en tallas. Puede ser una clasificación simple, como “chica”, “mediana” y “grande”. O más elaborada, en la que, por ejemplo, utilizamos números: talla cero, doble cero, cinco, siete, nueve, etc.
En los salvadores del conocimiento impreso, también se utilizan diferentes medidas. Hasta hoy no se han podido establecer parámetros acerca de los tamaños, a pesar de que son iniciativas que ya se propusieron en España.
El tamaño del libro es proporcional a las medidas del papel. Este material, en las grandes impresoras, no se distribuye como nosotros lo conocemos en hojas tamaño carta. Si no que son pliegos de papel en el que se imprime y posteriormente se dobla y corta de determinada manera. Se repite el procedimiento con cada pliego impreso, se unen y se pegan para conformar el libro. Por tal motivo, dependiendo del tamaño de los pliegos de papel, será en tamaño del libro.
Los tamaños con los que se trabaja actualmente son:


Por fuera un libro se divide en:
-Corte: la superficie que presentan al exterior las hojas
-Lomo: en donde se pegan o cosen los pliegos que conforman el libro
-Tapas: Son las hojas o el cartón que recubren el libro.




De libros me como un taco (Lenguaje de editores)

o   Hoja. Es la unidad de papel en blanco. Está compuesta de dos caras; un anverso y un reverso.
o   Página. Es cada una de las caras de una hoja
o   Pliego. Es una hoja grande de papel, en cualquier modalidad (extendida, doblada, impresa, en blanco, etc.)
o   Plieguecito.  Es un pliego cuando se dobla por la mitad.
o   Cuartilla. Es una cuarta parte de un pliego
o   Octavilla. Es la octava parte de un pliego.
o   Terno. Conjunto de tres pliegos impresos e insertos uno dentro de otros
o   Cuaderno. Cuatro pliegos metidos uno dentro de los otros.
o   Cuadernillo. Son cinco pliegos de papel.
o   Mano.  Son cinco cuadernillos
o   Resma. Son 500 hojas
o   Resmilla. Son 20 cuadernillos
o   Bulto. 1000 hojas
o   Atado. 1500 hojas
o   Fardo. Son 2,500 hojas
o   Libro. Es todo aquel impreso, que no es un periódico, reúne 49 páginas.
o   Folleto. Publicación d menos de 49 páginas.
o   Hoja suelta. Apenas llega 5 páginas impresas.

Después de este desnudo al libro, no cabe duda que ahora conocemos partes que antes habíamos visto pero no sentido, olido o imaginado. No queda más que leer, leer y seguir leyendo
“Somos lo que vestimos. Nacemos desnudos pero morimos vestidos.  La ropa es lo único que pretendemos llevarnos al otro mundo”. Homenedes


 Fuentes
-Zavala Ruíz, Roberto. El libro y sus orillas. México. UNAM. 1995
(Libros fotografiados) 
-Krickeberg, Walter. Mitos  yleyendas de los aztecas, incas, mayas y muiscas. FCE. México. 2012
- Fuentes. Carlos. La región más transparente. Alfaguara. México. 2008



sábado, 19 de abril de 2014

El universo del cincel en libros. Control de lectura 6.


Imagen tomada de thedivanoftheshadow.blogspot.com



Querida hermana: 

Eres la persona con la que he compartido 21 años de vida y lustros de fantasías memorablesHace algunos años no podría haberte escrito esto. Nuestros lazos malheridos nos impedían vernos y platicar con tanto fervor como ahora. Y hoy, no imaginas la felicidad que me produce verte los viernes. 

 Sabes, me quedé pensando en tu confidencia. Así como las hormigas no estiman la magnitud de su trabajo milimétrico, sospechas que tu talento en las artes es estéril. Con lágrimas en los ojos, me dijiste que era imposible concursar en el teatro maléfico que han montado todos menos tú. ¿Cómo valorar tus finos trazos con el carbón, cuando nuestra otra compañera delinea toscos bocetos con un bisturí?  

Los artistas se mueren de hambre,  viven como vagabundos y pierden el tiempo, dicen todos.  Te pido que no los escuches. Que al igual que tus compinches artesanos, mires tu virtud con los materiales. Respetes cada figura que con la lija tallas. Ames tus líneas en los cuadernos sketchAprecies tu paciencia para crear artículos hermosos de un poco de periódico, pegamento y miles de dobleces. Y, sobre todo, que no dejes tu sueño de ser diseñadora gráfica. 

Te aseguro que no te mueres de hambre, ni que vivirás como vagabundo Son tantas las opciones en las que puedes desarrollarte que estoy segura que con ese amor con  que haces las cosas, encuentras un buen cometido social.  

Justo en clase, leí un poco sobre el inimaginable mundo del diseñador gráfico en las  editoriales y pensé en ti. Es un ejemplo para que notes cuan valiosa es tu profesión; mira que en las "fábricas de libros" fungen uno de los roles más importantes.  De nada sirve un libro que guarde todos los secretos del mundo, sino seduce a sus prospectos  lectores. ¿Y cómo se logra? ¡La forma también importa! 

En primer lugar, el diseñador tiene el cometido de  homogeneizar tipografía, forros, materiales, el tipo de impresión, el papel y las ilustraciones con  el contenido del texto. Por supuesto no es una tarea fácil y mucho menos una labor que cualquier pueda realizar.  Se conjuga con las labores de ventas, del editor, del corrector, del impresor , pero sobre todo, se trata de hacer de un libro  arte.  
Imagen tomada de comunidad.biensimple.com

Para la elección de la tipografía se considera el tipo de impresión en que se plasmarán las letras;  no es lo mismo imprimir caracteres mecánicos, o en máquinas de escribir o por técnicas fotográficas. Además se toma en cuenta el tema del libro; así se designa un alfabeto grande y redondo para libros de niños y más pequeños para las ediciones de bolsillos. 

En cuanto a los forros y las portadas, son las partes de mayor interés. El artesano de libros despliega su imaginación en dichas secciones. Puede emplear dibujos, fotografías, letras creadas por ellos mismos, texturas, técnicas publicitarias, etc. ¡Imagínate la gran responsabilidad de concretar esos personajes de los que hablan las historias de los manuscritos! 

Los materiales de impresión son una forma máde mostrar las habilidades del diseñador. Desafortunadamente en países como el nuestro, en el que la lectura es escasa y las librerías se extinguen, hay una limitante de éstos. Entonces, los "estilizadores de libros" , además de tomar en cuenta el precio y la viabilidad del material, deben vigilar su disponibilidad en la región.  

Lo mismo ocurre con el papel. Debido a que es la materia prima del libro, es fundamental su elección. Puede ser un papel de excelente calidad, pero si el diseñador se equivoca y lo elige para un libro dirigido a niños, será en vano su costo de producción; no por el público sino por las tendencias de  mutilación de textos en los pequeños. 

imagen tomada de globedia.com
Las imágenes, dibujos y fotografías son otros de los problemas que resuelve un diseñador. Estas, además de cambiar de acuerdo a la temática del texto, se adaptan a los tamaños que seleccionan los creadores de la forma. Grandes, medianos, chicos,  de bolsillos, de mochilas, de bosas... ¡Muchas opciones de tamaño! 

Hermana, espero no haberte aburrido con esta reseña, sólo quiero que te des cuenta de tu habilidad. No necesitas ser médico o físico o periodista, sólo se tú. Sigue el camino mayúsculo del diseño; eres una artista, una persona capaz de captar el mundo a su manera en un boceto.  

Con mucho cariño y con ansias del próximo fin de semana.

Fuente
-Smith, Datus. Guía para la publicación de libros. Universidad de Guadalajara. México. 1991